Año Jubilar 2024: La última batalla de Alonso Fajardo ‘El Bravo’.
Habla de un personaje como Fajardo ‘El Bravo’ Es muy difícil. No sólo por lo que dijo Plinio el JovenQué “Es difícil presentar las cosas viejas como nuevas” sino porque la figura de El Bravo es más grande que el papel y la tinta (o en este caso, el kilobytes) que se dedican desde hace siglos a hablar de su figura.
Creemos que para relacionar adecuadamente esta historia con la historia de nuestro país, debemos empezar por el final: Se presume que Alonso Fajardo “El Bravo” murió en Caravaca en 1461.
Y ahora volvamos al principio.
GUERRERO, HÉROE, SAQUEADOR.
Se conoce la fecha de la «muerte» de Alonso Fajardo, pero no la de su nacimiento, más allá de que ya dio a luz en siglo quince. De estirpe guerrera (sus antepasados se hicieron grandes liderando la “guerra contra los moros”), Alonso se ennobleció ante los muros de la Fortaleza Xiquena (perteneciente a Lorca, y lamentablemente mal conservada), dando origen a su leyenda. “El Bravo” encarnaba el arquetipo de infancia medieval, el noble se dedicó principalmente a la guerra, dando fuertes y frecuentes quebraderos de cabeza a los musulmanes, a otros castellanos en nombre del rey, y también al propio rey. Su apodo era tan conocido y temido que, según cuenta la gente, bastaba con mencionarlo para que cayeran las hojas y se llenara de tierra el camino, de lo contrario habría que tratar con él en persona.
Su mayor hazaña considerada como tal fue la victoria en la Batalla de los Alporchonesde memoria inmortal en la historia de Murcia, y que tuvo lugar en las zonas de lorca, del cual nuestro protagonista era el guardián de la fortaleza.
En 1452, las tropas del caudillo nazarí Al-Abbas Regresaban a Vera (Almería) después de un exitoso saqueo de las tierras de Murcia, cuando un enfurecido Alonso Fajardo cayó sobre ellos con una fuerza compuesta de infantería y caballería. Aledo, Murcia y Caravaca. Los combates se prolongan debido a las constantes reorganizaciones de las filas musulmanas, por lo que un cansado Fajardo alza la voz y desafía al líder moro Al-Abbas a un combate único que resolvería la batalla de una vez por todas. «El Bravo» logró desmontar al capitán enemigo y hacerlo prisionero, haciendo quebrar la moral del bando musulmán, que se disolvió. Esta victoria dio unos años de relativa paz a la frontera murciana y alimentó la epopeya de la ya heroica figura de Alonso Fajardo. Cabe mencionar, porque no podía ser de otra manera, que la victoria cristiana fue atribuida a la intercesión de San Patriciocuyo día (el 17 de marzo) tuvo lugar la batalla; A partir de ese momento San Patricio se convirtió en el patrón de Lorca y de la ciudad de Murcia.

El apellido Fajardo se hizo famoso, pero detrás de escena, las tensiones familiares eran terribles. Alonso tuvo una larga y amarga disputa con su propio primo, pedro fajardopor cuenta de Adelantamiento de Murcia, una posición que Alonso creía que merecía según la ley de sucesiones. Esto lo puso en conflicto no sólo con sus allegados, sino también con su señor el rey. Enrique IV además. Ante tal situación, «El Bravo» decidió aumentar su poder a las malas, haciendo honor a su otro apodo, Alonso «El Malo», atacando a los señoríos cristianos rivales, aliándose con los musulmanes con la intención de asediar Murcia y destruir todo el territorio. . riqueza que se puso a su alcance. Logró retener al comandante de ricota en el castillo de Caravaca (Alonso Fajardo era entonces señor de la ciudad de Caravaca) mientras saqueaba sus tierras. Como es lógico y natural, Enrique IV toma medidas y ordena el despojo del “Bravo” de sus territorios.
LA IRA DE UN MONARCA, UNA CARTA DOLOROSA Y UNA ÚLTIMA ASEDICUALQUIERA
Acosado por sus enemigos, lanzado contra él por la corona, Alonso Fajardo escribió, precisamente detrás de los muros del castillo de Caravaca, la célebre carta dirigida en 1458 a Enrique IV; carta en la que, haciendo gala de enorme valor, por decirlo suavemente, casi reprocha al rey que enviara tropas para atacarle después de todos los servicios que les había prestado a él y a su padre Juan II; que si quisiera sacarlo del juego le compraría todo lo que tiene para retirarse a Aragón, porque costaría menos que gastar en soldados; y que si el rey persistía en hacerle daño, «…la destrucción del rey don Rodrigo viene sobre vosotros y vuestros reinos, y vosotros lo veis y no podéis remediarlo como él lo ha hecho…». ¡Unas pocas cosas!
La carta debió templar su moral, ya que el rey le concedió el perdón a cambio de su arrepentimiento. Pero Fajardo no fue llamado «Bravo» por la gentileza de su carácter, y con el tiempo volvió a sus antiguas costumbres, ejerciendo la violencia contra otros señores cuya lealtad al monarca era manifiesta y notoria.
Enrique IV decide entonces acabar de una vez por todas con el infanzón y le arroja lo mejor, la élite de sus ejércitos, una fuerza monstruosa comandada por su pariente y El delantero del Real Pedro Fajardo; el marqués de villena juan pacheco; el comandante de artillería Lope Mendoza; Y Pedro Girónmaestre de la Orden de Calatrava.
Con un enemigo tan imparable a las puertas, «El Bravo» se refugió en su último bastión, caravacaal mando de una resistencia que aún soportaba el asedio de su castillo ¡Durante casi un año!obligando al contingente agresor a exigir repetidamente refuerzos.
El 7 de diciembre de 1461 el propio Adelantado Pedro Fajardo informó al rey de la derrota de su primo Alonso Fajardo “El Bravo” y de la rendición de la plaza de Caravaca. Por el momento, el destino de nuestro feroz personaje no está del todo claro. Es lógico suponer que murió durante el asedio, pero esto no se menciona en ninguna parte ni su cuerpo fue exhibido como advertencia ejemplar. Es posible, por tanto, que estuviera cautivo y que su destino le llevara por otros rumbos, o que incluso pudiera escapar de Caravaca y esconderse en Granada, donde todavía tenía aliados.
De todos modos, la figura de “El Bravo” quedó impresa en oro en la historia del antiguo “Reyno” de Murcia. Un personaje cuya apasionante vida inspiró ciertos versos de Lope de Vega; que si hubiera sido británico o americano ya habría tenido series y películas dedicadas a él; y cuyas palabras, recogidas en esta carta enviada desde las murallas de Caravaca, todavía tienen una fuerte resonancia en este famoso pasaje:
“Oh rey virtuoso, estoy desesperado al ser rechazado así por Vuestra Alteza; Un clavo es cosa común, y por él se pierde una herradura, y por una herradura un caballo, y por un caballo un caballero, y por un caballero un ejército, y por un ejército una ciudad y un reino.

Fuentes:
– https://www.regmurcia.com/servlet/s.Sl?sit=c,373,m,3032&r=ReP-20605-DETALLE_REPORTAJES
– https://degenesycongeneres.com/2020/08/23/alfonso-fajardo-el-bravo/ (Carta al rey Enrique IV)
– https://dbe.rah.es/biografias/56020/alonso-fajardo-pineiro
https://digitum.um.es/digitum/bitstream/10201/14703/1/08%20vol%202%20Carta%20de%20Alonso%20Fajardo%20al%20Rey%20de%20Castilla.pdf (Carta transcrita de Torres Fontes)
Fuente de la imagen: www.turismocaravaca.com
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