El Ministerio de Sanidad recuerda que el verano es la época del año en la que la radiación solar ultravioleta alcanza sus niveles más altos, lo que aumenta significativamente el riesgo de daños en la piel y los ojos por una exposición prolongada sin la protección adecuada.

Proteger a los niños de los efectos de la radiación solar es sumamente importante; De hecho, los niños menores de un año nunca deben exponerse a la luz solar directa. La exposición durante la infancia aumenta el riesgo de sufrir posteriormente cáncer de piel y puede provocar graves daños oculares, por lo que es fundamental protegerlos en estas edades con un factor de protección superior a 30.

La mayor parte de la exposición a los rayos ultravioleta se produce antes de los 18 años, lo que requiere medidas para proteger la salud de la piel y los ojos de los menores.

Debes saber que la exposición al sol aumenta el riesgo de sufrir cáncer de piel, acelera el envejecimiento de la piel y provoca daños oculares. La evidencia muestra que un período corto de exposición intensa, como tomar el sol, se asocia con el doble de riesgo de melanoma.

Se estima que los problemas oculares aumentarán hasta un 25 por ciento durante estos meses.subrayó el director general de Salud Pública y Toxicomanías, José Jesús Guillén, Por ello, en verano se recomienda proteger los ojos con gafas de sol con diseño envolvente o con paneles laterales..

Una de las recomendaciones es evitar la exposición durante las horas centrales del día y buscar espacios de sombra en los periodos de máxima radiación. Además, se debe utilizar ropa protectora, como sombreros de ala ancha, que protejan los ojos, la cara y el cuello, y utilizar crema solar de amplio espectro en abundancia y siempre que sea posible con un factor de protección solar alto. . a veces es necesario.

Además, el consumo de ciertos medicamentos, así como el uso de perfumes y desodorantes, pueden sensibilizar la piel y provocar quemaduras al exponerse al sol.

Falsos mitos sobre la exposición al sol

Guillén señaló que existen mitos completamente falsos en torno a la exposición al sol, como si el bronceado fuera saludable, cuando en realidad es una forma de defensa del cuerpo contra mayores daños causados ​​por los rayos UV..

Además, el bronceado no protege frente al sol, ya que el color de piel oscuro en personas de piel clara sólo ofrece una protección baja, equivalente a un índice de protección en torno a 4.dijo el jefe de salud pública.

También es un error creer que en los días nublados la piel no arde. Hasta el 80 por ciento de la radiación ultravioleta solar puede atravesar una ligera capa de nubes. La neblina atmosférica es incluso capaz de aumentar la exposición a la radiación.

Los protectores solares no deben usarse para aumentar la duración de la exposición al sol, sino más bien para aumentar la protección cuando la exposición es inevitable. Asimismo, la protección que brindan depende en gran medida de su correcta aplicación.